La actual administración de Estados Unidos, liderada por el demócrata Joe Biden, prevé aplicar un fondo de emergencia para el año fiscal 2025. La cantidad asignada sería de $4.700 millones de dólares y su destino, la seguridad fronteriza, según NBC News.
La iniciativa persigue intensificar las operaciones a cargo del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en caso de un aumento significativo de la inmigración.
Dicho departamento tendría acceso a al fondo solo si el número de inmigrantes indocumentados que crucen la frontera sur supere un umbral no aclarado en el presupuesto.
Si el dinero no se emplea para abordar un aumento en la migración, se transferiría a los fondos de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
Resistencia republicana
Está claro que la propuesta de Joe Biden enfrentará una fuerte resistencia de los representantes republicanos en el Congreso.
Previamente, la oposición legislativa se negó a aprobar un financiamiento de $13.600 millones de dólares (USD) solicitados a modo de emergencia para responder al aumento récord de migrantes en el propio límite fronterizo.
El plan se centra en la seguridad fronteriza. Además solicita fondos significativos para las áreas relacionadas con las diferentes problemáticas en la referida zona.
Esto incluye $405 millones de dólares para contratar 1.300 agentes adicionales de la Patrulla Fronteriza, así como fondos para mantener las 34.000 camas de detención existentes de ICE.
De igual modo se asignan $1.000 millones de dólares para ayuda a Centroamérica y casi $1.000 millones para abordar el retraso de más de 2.4 millones de casos pendientes en los tribunales de inmigración de Estados Unidos.
Por último, con el fin de combatir el contrabando, el presupuesto solicita fondos para contratar 1.000 agentes adicionales de CBP y $849 millones de dólares para tecnología de detección de fentanilo en la frontera.
