Es noticia en Cuba las sanciones impuestas a trabajadores por cuenta propia de Ciego de Ávila tras acumular un adeudo de más de cinco millones de pesos.

Según reporte del periódico Invasor, los contribuyentes fueron procesados por delito de evasión fiscal, “luego de que la Oficina Nacional de Administración Tributaria (ONAT) agotara los recursos legales y de convencimiento, sin resultados”.

Se les juzgó en la Sala de lo Penal, “al haberse determinado sus deudas y vencido el plazo del requerimiento para el pago”, declaró Maidelis Díaz Aragón, subdirectora primera de la ONAT provincial, al medio.

De tal manera, se pudo conocer que “el monto del adeudo es superior a los cinco millones de pesos”.

El “castigo” impuesto consistió en sanciones de privación de libertad, comprendidas entre tres y cuatro años, y trabajo correccional con y sin internamiento, así como el mandato de pagar el total de la deuda contraída, expone el periódico local.

La directiva de la ONAT reiteró que “los tributos captados por el Estado cubano permiten respaldar muchos de los gastos sociales, dígase Educación, Salud y Asistencia Social”.

En este sentido, añadió que “la ONAT tiene un plazo de hasta cinco años para procesar los expedientes por Evasión Fiscal”.

Invasor cita un reporte de Trabajadores donde se señala que “al cierre de julio del 2019 ya había 71 contribuyentes declarados culpables de este delito, lo que conlleva penas de hasta ocho años de privación de libertad”.

La Oficina Nacional de Administración Tributaria publicó una nota en marzo donde informó que acciones de control fiscal realizadas contra el incremento de precios, todas sobre personas naturales, “arrojaron como resultado la determinación de adeudos con el Presupuesto del Estado ascendentes a más de 10 millones pesos”.

Entre las actividades seleccionadas para fiscalizar estuvieron: servicio gastronómico en cafetería, ponchero, panadero dulcero, productor vendedor de productos alimenticios, vendedor de producción agrícola en puntos de ventas y quioscos.

Además, las de productor minorista de productos agropecuarios, productos o vendedor de artículos varios, productor recolector de materiales con fines constructivos y otras actividades de impacto en los precios de productos y servicios con destino a la población, indicaron.