Un descenso en el total de ventas de vivienda se vivió el pasado mes de marzo en Miami, Florida. El mercado inmobiliario sufrió una notable desaceleración en sus operaciones con una caída del 15% en las transacciones generales. Por ejemplo, en el condado de Miami-Dade se registraron  2 mil 141 ventas de viviendas unifamiliares y condominios en marzo. En idéntico mes de 2023 se ejecutaron 2 mil 513, según el informe mensual de Miami Association of Realtors.

Una tendencia similar experimentó Broward. En marzo del presente año se vendieron mil 84 casas, por las 3 mil 133 comercializadas 12 meses atrás.

Tal situación se traduce en la primera caída de dos dígitos en el sur de Florida desde agosto pasado. Es, sin dudas, una señal de la creciente presión sobre los compradores de vivienda.

Presiones claves

Son exactamente dos presiones claves las que enfrentan los compradores inmobiliarios. La primera es el valor de las tasas hipotecarias y la segunda, los elevados precios históricos.

El precio promedio de venta en Miami-Dade roza los $650 000 USD para viviendas unifamiliares. Los condominios se cotizan en $445 000 USD. En tanto, Broward muestra una tarifa de $607 000 USD para casas y $288 750 USD para condominios.

Es un hecho que los compradores tienen cada vez más opciones residenciales. Miami-Dade tiene 4.3 meses de oferta de casas y 8.2 meses de condominios. 

En cambio, Broward muestra 3.9 meses de casas y 7.2 meses de condominios. Un estado saludable, en este aspecto, consiste en seis a nueve meses de inventario. 

Una tendencia en el mercado inmobiliario actual es que los compradores concretan sus operaciones con dinero en efectivo. Miami-Dade vio el 37.2% de las ofertas cerrar en efectivo, y Broward una cantidad superior al 42.6%. 

Se estima que en un futuro, a mediano plazo, las tasas de interés serán el factor clave que influya en los compradores y vendedores.