La migración latina, incluida la cubana hacia Estados Unidos, no cesa, ni aparentemente lo hará, más allá de que sea un proceso social habitual en todas las épocas. Muchas personas emigran de manera ilegal y otras lo hacen con documentos legales, como los visados de turismo o negocio. Pero el estampado de una visa no te garantiza la entrada a territorio norteamericano.

Con excepción de Chile, el resto de países de América Latina, necesitan de un visado para entrar de manera legal a los EE.UU, muchos lo hacen con las demandadas visas B-1 y B-2. Una vez frente al funcionario de Aduana, el turista promete regresar a su país de origen, muestra su boleto de regreso y garantiza, que es un itinerario de pocos días, que no tiene intenciones de quedarse en esa nación.

Siempre que llegas a un puerto de entrada en cualquier aeropuerto de Estados Unidos, te van a solicitar documentación y seguramente te hagan una inspección exquisita. En algunos casos a pesar del visado la petición de entrada es rechazada y no te dejan entrar, por algún indicio de que pudieras quedarte.

VISADOS DE NO-INMIGRANTE A ESTADOS UNIDOS

Siempre se aconseja estar bien preparados con la documentación para evitar que te denieguen la entrada a Estados Unidos con cualquiera de las visas de no inmigrante, ya sea la B-1 o la B-2.

La visa B1 es utilizada para entrar a Estados Unidos, con alguna finalidad de “negocio”, ya sea para asistir a convenciones y conferencias científicas, educativas, profesionales o empresariales. También puedes ser elegible para esta visa de no inmigrante si pretendes participar en alguna capacitación de corta duración. Algunas de estas visas sirven para trabajar en EE.UU, pero de forma limitada y con algunas condiciones.

Mientras la categoría B-2, te permite entrar en ese país, temporalmente por turismo y vacaciones para visitar a amigos y familiares o para seguir un tratamiento médico durante un tiempo determinado. La duración máxima de esta estadía es de seis meses. La visa B-1/B-2 es la combinación de ambos propósitos, turismo y negocios.

¿Qué puedes hacer para convencer al funcionario de migración en el aeropuerto? Llegar con pruebas y documentos que demuestren su intención de regresar a tu país de origen, esencial el boleto de regreso.

También la inscripción de una universidad, propiedades en tu país de origen, puedes llevar tu contrato laboral, cosas por el estilo. La última recomendación es que si los documentos no están en el idioma inglés, se pudieran llevar traducciones.