A pesar de la ardua tarea que significó para un migrante cubano llegar a México, en su gran mayoría procedentes de Nicaragua, muchos de ellos ven frustrado su intento de acceder a Estados Unidos y son deportados desde el país vecino. De hecho, el aumento de las deportaciones seguirá creciendo.

Este fin de semana fue noticia que México deportó a Cuba otro grupo de 64 migrantes cubanos, sumando un total de 1247 ciudadanos de este país en lo que va de 2022. En esta ocasión el grupo de cubanos era integrado por 51 hombres y 13 mujeres.

El vuelo de repatriación llegó por el Aeropuerto Internacional de La Habana y tras ser sometidos a pruebas médicas, fueron trasladados a sus provincias de origen. Desde las fuentes oficiales de la isla, expresaron que estos migrantes habían salido de manera legal vía aérea y se habían incorporado al flujo ilegal a través de México a EE.UU.

Esta es la operación número 21 que se efectúa desde México para regresar cubanos desde tierras aztecas a la isla en lo que va de año. Ese mismo día un servicio guardacostas norteamericano también devolvió a 32 balseros indocumentados, la operación número 36 en lo que va de año. La tercera en la semana pasada.

Los guardacostas de EE.UU junto a los gobiernos de Bahamas y México han devuelto a la isla desde inicios de año a casi 3 mil personas. En los últimos meses aumentó notablemente el número de migrantes cubanos que buscan entrar por la frontera norte de México hacia EE.UU.

Aunque muchos lo han conseguido, otros han fallecido en el Río Bravo o en accidentes de tráfico. Otros, miles, han sido devueltos a la isla, donde en su mayoría no tienen ninguna posesión, pues venden sus viviendas para intentar emigrar por esta vía terrestre, siguiendo diversas rutas por varios países de Centroamérica como Nicaragua, Panamá y Honduras.