Finalmente llegó la noticia que millones de cubanos esperaban desde hace varias semanas. Este sábado sincronizó al Sistema Electroenergético Nacional (SEN) la termoeléctrica de Matanzas Antonio Guiteras, unidad generadora más grande del país. Luego de más de tres meses fuera de funcionamiento el coloso yumurino comenzó a brindar cargas al SEN a las 11:34 a.m. Se prevé que esté a prueba durante las 72 horas iniciales tras su sincronización. Se mantendrá generando para verificar su comportamiento en línea.

El pasado jueves se realizó un intento por incorporarla al SEN pero no fue posible debido al mal funcionamiento de un sistema asociado a la turbina. Es un inconveniente común en estos casos cuando se pretende echar a andar la planta desde cero. 

Apenas los expertos se percataron de la situación puntual con la turbina comenzaron las labores de restablecimiento. En poco menos de dos días quedó todo listo para hacer un nuevo intento de arrancarla y se logró en la mañana del sábado. 

Averías resueltas, por ahora

Cuando se detuvo la principal planta generadora del país, hace más de tres meses, los especialistas de la Unión Eléctrica (UNE) coincidieron en que esta no sería la solución definitiva. Inicialmente se desconectó por un fallo eléctrico en una de sus plantas. Sin embargo, unas semanas antes había salido del SEN por un fallo imprevisto en el condensador de la turbina. 

Varias situaciones en los últimos meses y años han guiado a la salida de la Guiteras en reiteradas ocasiones del SEN. En los días finales del mes de marzo, Edier Guzmán Pacheco, director de generación térmica de la UNE, dijo que podía comenzar a funcionar en junio. Sin embargo, el propio experto en el tema afirmó que su puesta en marcha no supondría una solución definitiva a todos sus problemas técnicos. 

Se estima que con el aporte de la CTE Guiteras al SEN se pueda cubrir la demanda durante los meses de verano. Ese es un período de alto consumo eléctrico en Cuba. Se pronostica que la industria matancera se detenga a finales de año para recibir una reparación capital.