Esta semana se formó la segunda depresión tropical de la temporada de huracanes pero se situó en el Pacífico Oriental sin peligro eminente para Cuba u otras islas del Caribe. Aunque sí pudiera afectar a México. 

Según información oficial, la depresión tropical Two-E se convirtió en la tormenta tropical Blanca este martes. En su punto máximo, Blanca tenía vientos de 60 mph, pero desde entonces ha disminuido a fuerzas que apenas alcanzan los criterios de ciclones tropicales. 

La última actualización del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos mostraba que Blanca se debilitaba rápidamente a medida que se acercaba a la costa de México. A pesar de las temperaturas cálidas del agua, el aire seco y estable pudo ingresar a la circulación. Los vientos han disminuido a 35 mph y la presión central ha aumentado a 1005 mb. Se espera un debilitamiento continuo.

La misma continuará debilitándose gradualmente mientras se mueve lentamente hacia el oeste durante el resto de la semana. La tendencia abrumadora de los modelos de pronóstico mantiene la tormenta en aguas abiertas, con una sola probabilidad que la envía al norte, rumbo a Estados Unidos, lo cual es muy poco probable.

Blanca es el único sistema que se espera que sea tropical durante los próximos cinco días. Las noticias presumen que so se prevé el desarrollo de ciclones tropicales en ninguna otra zona del Pacífico oriental. 

La tormenta tropical Blanca continuará moviéndose hacia el oeste lejos de México. Debería permanecer como tormenta tropical hasta la mitad de la semana, pero se debilitaría en algún momento de jueves a viernes, hasta convertirse en una depresión tropical.

En cuanto al Atlántico, la zona de Cuba, en esta semana y para la próxima no se espera el desarrollo de ningún evento meteorológico de este tipo durante los próximos cinco días para la cuenca de este océano. 

Aunque apenas ha comenzado esta semana la llamada temporada ciclónica, ya han salido los dos primeros fenómenos, nombrados Ana y Blanca sin que presentaran mayores preocupaciones para territorios poblado. Los analistas ven en la actualidad a los trópicos bastante tranquilos aunque ya se avizoró que a medida que pasen las semanas y la temperatura se eleve, deben incrementarse las formaciones de tormentas. 

Con los pronosticadores prediciendo una temporada de huracanes por encima del promedio este año, todos están conscientes de que solamente se necesita un fenómeno de estos para declarar el desastre. El Centro de Huracanes de Miami predijo que podríamos ver de 13 a 20 tormentas con nombre, de las cuales de seis a 10 podrían convertirse en huracanes con vientos de 74 millas por horas.