Finalmente, después de varios años en la Unión Europea (UE), Croacia inició el 2023, asumiendo el euro como su moneda oficial y formando parte del tratado de libre visado en Europa, conocido como Schengen.
La nación balcánica se despidió de su moneda kuna y se convirtió en el vigésimo miembro de la eurozona, además del país número 27 en beneficiarse con el tratado de la zona Schengen donde no se solicitan documentos oficiales a los nacionales o residentes de estos países.
La zona Schengen se mira como si fuese un gran país, pues permite que más de 400 millones de personas se muevan libremente. O sea, los residentes en estos países no necesitan enseñar visados o pasaportes en los vuelos entre estas naciones.
“Es la temporada de nuevos comienzos. Y no hay lugar en Europa donde esto sea más cierto que aquí en Croacia”, tuiteó la jefa de la UE, Ursula von der Leyen, cuando se reconoció oficialmente a Croacia como un miembro más del convenio económico.
La presidenta de la UE se reunió con el croata Andrej Plenkovic y la presidenta eslovena Natasa Pirc Musar en un cruce fronterizo con Eslovenia, que ya era miembro de la UE, y luego se dirigió a Zagreb a celebrar el suceso.
CROACIA AL EURO Y ZONA SCHENGEN
Los expertos dicen que la adopción del euro ayudará a proteger la economía de Croacia en un momento en que la inflación se está disparando en todo el mundo, y los precios del combustible y alimentos están al alza.
No obstante, algunos croatas aunque dan la bienvenida al fin de los controles fronterizos, temen a que el cambio al euro provoque un aumento en el costo de vida, pues algunos empresarios subirán los precios.
Aunque ahora se asume de manera oficial, ya el uso del euro estaba muy extendido en Croacia. Los croatas han valorado durante mucho tiempo sus activos más preciados, como automóviles y apartamentos, en euros, lo que demostraba una falta de confianza en su entonces moneda.
Alrededor del 80 por ciento de los depósitos bancarios estaban denominados en euros y los principales socios comerciales de Zagreb se encuentran en la eurozona. Así que el cambio no será tan rotundo. También se prevé un aumento del turismo, ahora que los vecinos europeos podrán entrar a Croacia sin muchas complicaciones ni papeleos.
