En medio de la escasez estatal de insumos, en entidades como las ópticas, el precio de los espejuelos en Cuba no está al alcance de todos, como debía ser, pues la alternativa privada viene quedando como la única salida para mejorar la visión de algunos. ¿Es tu caso?

Los medios oficiales, como el Girón en Matanzas, así lo reconocieron en un reporte reciente, pese a los precios, son Mipymes privadas de ópticas en ese territorio, las que están salvando el problema, pues en las estatales prácticamente no hay nada para laboral, pese al empeño de sus técnicos.

Según esta información en Matanzas (en el resto de Cuba sucede lo mismo), la búsqueda de espejuelos se ha convertido en un tormento para quienes dependen de ellos en su día a día. Entre los precios exorbitantes de las Mipymes, ópticas privadas, y la escasez que reina en las ópticas estatales, la compra se vuelve una odisea. Para mejorar la visión, hay que apretarse el cinturón y desembolsar una suma considerable, aseguran.

“La realidad es que ahí no tienen prácticamente nada. Incluso, hasta para reparaciones escasean las piezas de repuesto; ni hablar, entonces, de la fabricación de espejuelos. La escasez es generalizada e incluye armaduras, lentes; en el caso nuestro, no existía ni la manera de tratar con el lente, debido a la profundidad que requerían los del niño”, dijo una madre entrevistada.

Precios de los espejuelos en Cuba en la actualidad

Según esta misma madre, son los mismos trabajadores estatales que, en el afán de “resolverle” el problema, los puso en contacto con un privado donde le cobraban por estos espejuelos entre “13 000 y 16 000 pesos, según lo que hubiese que hacerle a los cristales, más la armadura, por supuesto”. ¿Así está el precio de los espejuelos en tu zona en Cuba?

Lo otro que denuncian es que aunque desembolses esa enorme suma, los espejuelos de los privados llegan con errores, a veces no es la graduación requerida a pesar de que pagaste a un enorme precio este artículo.

Según una administradora de una óptica estatal en Matanzas, desde el 2020 ellos no reciben nueva mercancía. Y el panorama desolador no parece cambiar en el corto plazo. Hay graduaciones, sobre todo de niños, que hace más de cinco años no llegan.

“Hoy funcionamos para reparaciones; aunque no contamos con recursos para ello, lo hacemos con lo que nos proporciona el mismo cliente o algunas donaciones”, aseguran. Así está el triste panorama de la compra de espejuelos en Cuba.