Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, ratificó este 24 de enero, en reunión fronteriza con las autoridades aztecas, que entre otras medidas, los vuelos de deportación se mantendrán a los países del área con más migrantes irregulares, incluida Cuba.

Según reportes locales, para frenar la migración irregular, el gobierno de Estados Unidos continuará con los vuelos de repatriación a varios países de América Latina y el Caribe, así como a Rumanía e India.

Salazar explicó que enfrentar esta migración sin precedentes es una prioridad de su gobierno, y advirtió que quienes crucen la frontera con México de forma ilegal “sufrirán las consecuencias”.

En visita a la ciudad de Tijuana, Salazar, pidió “mano dura” y “sanciones” para aquellos migrantes que entran de manera irregular a México en busca de la frontera norteamericana con el objetivo de cruzar ilegalmente.

Seguirán los vuelos de deportación de Estados Unidos a Cuba

Los vuelos de deportación, según el funcionario, tienen el objetivo de regular el flujo migratorio y de combatir a las organizaciones criminales que facilitan los cruces ilegales.

Los países a los que se enviará a los migrantes por vía aérea son Guatemala, Honduras, El Salvador, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, República Dominicana, Nicaragua, Brasil, Cuba, Jamaica y Haití.

El embajador Salazar agregó que Estados Unidos seguirá trabajando con México y otros socios de la región para atender las causas fundamentales de la migración, reforzar los controles que disminuyan los flujos y para tomar medidas contundentes contra organizaciones criminales y coyotes.

En diciembre de 2023, México suspendió de manera temporal los vuelos de deportaciones desde su territorio. El Instituto Nacional de Migración (INM) tuvo que paralizar estos servicios de repatriación, donde se incluyeron numerosos cubanos, debido a que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le recortó el presupuesto para el último mes del año.

Esto significa que los extranjeros que están en centros de detención o refugios no podrán ser expulsados a sus naciones ni trasladados dentro de México hasta que se indique lo contrario.