El megaproyecto hidráulico Trasvase Norte-Sur avanza en su ejecución en el oriente de Cuba. El objetivo es trasladar agua por gravedad desde los ríos Toa y Yateras hacia el valle de Guantánamo. Han faltado varias veces los recursos como cemento, áridos, combustible, lubricante y equipamiento. Sin embargo, ya se nota el avance de la obra que beneficiará a miles de habitantes.

Las entidades encargadas de ejecutar el proyecto dieron a conocer cómo marcha el proceso actualmente. El contratista es la Unidad Empresarial de Base Norte-Sur Trasvase, y el constructor, la Unidad Básica Construcción de Obras Trasvases. 

Las obras están previstas se ejecuten en cuatro etapas diferentes de un quinquenio de duración cada una. El tiempo estimado es tan amplio debido a la alta complejidad de las obras a realizar. Este millonario proyecto no tiene precedentes en la tierra más oriental de Cuba. 

Más de 200 mil habitantes saldrán beneficiados

El megaproyecto beneficiará a 294 mil habitantes con agua de calidad y abasto seguro. Además, saldrán favorecidas múltiples instalaciones económico-sociales. Será clave para el riego de 28 mil hectáreas agrícolas y de caña. 

La estabilidad en el servicio hidráulico será notable en la ciudad capital de Guantánamo, así como en Manuel Tames, Ciro Frías, Héctor Infante, entre otras localidades. Los expertos coinciden en que el trasvase aportará anualmente 230 millones de metros cúbicos de agua. A su vez propiciará el aprovechamiento acuícola con la cría de peces en sus diques y ahorrará miles de toneladas de combustible.

El proyecto tiene, también, un impacto positivo en el medio ambiente. Dará la posibilidad de dejar de emitir a la atmósfera miles de toneladas de CO2. Por último, se estima que genere unos 27 mil empleos.

La obra comenzó en 2020 y hasta el pasado año se montó y probó la central hormigonera, clave para garantizar los grandes volúmenes de mezcla demandados.