El panorama inmobiliario en los Estados Unidos sigue exhibiendo contrastes marcados, con vecindarios en Queens, el Bronx y Brooklyn que ofrecen opciones asequibles mientras Manhattan sigue siendo un bastión de alquileres costosos.

En los vecindarios más alejados de la ciudad, como Jamaica y Flushing en Queens, Allerton y Pelham Bay en el Bronx, y Bay Ridge y Bensonhurst en Brooklyn, el alquiler promedio de un apartamento de una habitación se sitúa cómodamente por debajo de la marca de los $2,000 USD, brindando un alivio necesario para los inquilinos.

Sin embargo, el contexto cambia significativamente cuando se pone el foco en Manhattan. Encabezando la lista como el vecindario más caro de Nueva York, NoMad ostenta un sorprendente alquiler promedio de $6,033 para un apartamento de una habitación.

El vecindario vecino, el Distrito Flatiron, no se queda atrás, con un alquiler promedio de $5,933.

Otros vecindarios adinerados incluyen Chelsea, Stuyvesant Town y Greenwich Village, conformando los cinco vecindarios más costosos. Lo intrigante es que todos estos vecindarios se concentran en un radio de apenas una milla, subrayando el atractivo de las ubicaciones céntricas a pesar de los precios exorbitantes.

Los precios se están desacelerando (pero no disminuyendo)

Es relevante destacar el ascenso de Brooklyn en la jerarquía inmobiliaria. Dumbo, conocido por su reciente auge de edificios “ultra lujosos”, se destaca como el único vecindario de Brooklyn en los diez más costosos. Mientras tanto, varios vecindarios gentrificados de Brooklyn, como Greenpoint con un alquiler promedio de $4,507 para una habitación, Fort Greene con $4,340 y Prospect Heights con $4,240, confirman la aparición de Brooklyn como un jugador en el mercado de alquileres de alta gama.

A pesar de la prevalencia de precios de alquiler elevados, aún queda un destello de esperanza para los inquilinos conscientes del presupuesto. Un notable cincuenta por ciento de los vecindarios de la ciudad de Nueva York cuentan con alquileres promedio de una habitación por debajo de los $2,800, en sintonía con las tarifas promedio actuales en otras ciudades importantes como Boston y Miami.

No obstante, lo anterior muestra un panorama de costos excepcionalmente altos en una ciudad conocida por su oferta limitada. Esta realidad ha contribuido al aumento de los hogares compartidos y a un preocupante aumento de posibles estafas relacionadas con compañeros de vivienda.

Un informe reciente de la Cámara de Comercio resaltó el hecho alarmante de que el ingreso requerido para alquilar un apartamento de una habitación en la ciudad de Nueva York es el doble del ingreso promedio de la ciudad, subrayando aún más la crisis de asequibilidad que afecta a la región.

A medida que las dinámicas inmobiliarias de la ciudad continúan evolucionando, las disparidades entre los vecindarios nos recuerdan la compleja interacción entre la ubicación, la demanda y la asequibilidad en el cambiante panorama del mercado de viviendas de la ciudad de Nueva York.

Con información de Zumper