La youtuber Anita Mateu expone en su video «La verdad de los Supermercados en Cuba. Gasté más que en España» la dura realidad que viven los cubanos a la hora de hacer sus compras. 

En un recorrido por una de las tiendas MLC más grandes de Sancti Spíritus, Mateu muestra estantes vacíos, productos con precios exorbitantes y una variedad limitada de opciones.

«Los precios son equivalentes a los de España, y en algunos casos, incluso más altos», afirma. Un paquete de pasta cuesta 1,75 dólares, un kilo de arroz 3,40 dólares y un champú 7,50 dólares. La escasez es evidente: solo hay una marca de champú y una sola bebida en toda la sección de bebidas.

La mayoría de los cubanos no tienen acceso a estas tiendas, ya que no ganan en dólares o euros. «Yo puedo ayudar a mi familia porque tengo euros en mi tarjeta, pero la mayoría de las familias no tienen esa opción», relata Mateu. 

La alternativa es comprar a revendedores en la calle o en negocios privados, donde los precios son aún más altos, pero al menos se puede pagar en pesos cubanos.

COMPRAS EN CUBA

La experiencia de compra en sí misma es desalentadora, considera. «Las neveras están vacías», «no hay nada», «los precios son bastante caros», describe Mateu. 

Su compra de cinco paquetes de Mac and cheese, dos salchichones y un queso Gouda de 3.5 kg le costó 57,30 euros. Solo por el queso pagó $39. «Sinceramente, lo veo carísimo», asegura. «En España, con 50 euros, hago una compra mucho más grande.»

Las opiniones sobre el video coinciden en la crítica a la situación actual en Cuba. Se destaca la dificultad para adquirir productos básicos debido a los altos precios, haciendo referencia a la impotencia que genera esta realidad para quienes viven en la isla y para aquellos que la conocen.

Se menciona que la supervivencia de muchos cubanos depende de las remesas enviadas por familiares que viven en el extranjero. Asimismo, se compara la situación con otros países, como Miami y República Dominicana, donde los precios son considerablemente más bajos.

El video de Anita Mateu es un reflejo de la difícil situación económica que atraviesa Cuba. La alta inflación ha hecho que la moneda nacional no sea suficiente para cubrir los gastos básicos, y los supermercados en MLC, lejos de ser una solución, se han convertido en un símbolo de la desigualdad y la escasez.