El gobierno de Cuba intercambió con funcionarios de compañías aéreas y de viajes turísticos estadounidenses. El comunicado fue ofrecido por el director general de Asuntos Consulares y Cubanos Residentes en el Exterior, Ernesto Soberón.

Entre los objetivos que se abordaron, estaban las formas para estrechar el trato con los naturales de la isla que residen en norteamérica. Recientemente desde la nación norteña se autorizó una mayor cantidad de viajes de las aerolíneas American Airlines y JetBlue a los aeropuertos cubanos. Una cuantía que excede los 13 vuelos semanales adicionales con la ciudad de Miami como origen.

El encuentro bilateral se efectuó dentro de un momento económico difícil. El plan real del estado para el arribo de turismo a la mayor de las Antillas está por debajo de los niveles esperados.

Los grupos con mayor incidencia en el turismo con destino Cuba son canadienses con 298 mil 410 miembros. El otro flujo emisor importante son los cubanos que viven en Estados Unidos que visitan su país de origen y representan 212 mil 485. Una razón para sumar la continuidad de los vuelos que salen de América del Norte.

Rediseñar la estrategia del turismo

Cuando terminó el mes de agosto, la cifra que aterrizó en el país estaba en 971 mil 456 turistas foráneos. Este es un dato distante de los 2 millones 500 mil turistas que deseaba asimilar el archipiélago caribeño en el presente año.

Representa el 12,27% de los extranjeros que acogió la isla tropical en la misma época del año 2019. Constituyó la última vez que la nación cubana registrara sus mejores números antes de extenderse la covid-19 por el mundo.

El contexto demuestra que las instalaciones hoteleras no privadas en Cuba se encuentran desprovistas de huéspedes. Las autoridades de la industria turística han rediseñado su estrategia para que el país no sea solamente escogido por el calor y sus playas. Las opciones también demuestran otros sitios de interés al visitante, los paisajes, centros históricos y culturales, así como ofertas de salud.