La tormenta tropical Hilary ha dejado una profunda marca en California y partes del suroeste de Estados Unidos, desencadenando intensas lluvias y fuertes vientos durante este fin de semana. Aunque los efectos de la tormenta aún no han concluido, ya se han acumulado varios récords relacionados con esta perturbación climática.

Uno de los aspectos más destacados de la tormenta ha sido la intensidad de las precipitaciones. En un período de 48 horas, se registraron asombrosos 298 milímetros de lluvia en Mount San Jacinto, condado de Riverside, California. Además, los vientos alcanzaron ráfagas de hasta 135 km/h a una altura de 1.200 metros en Black Mountain, condado de San Diego, California.

Hilary ha marcado varios hechos notables en su paso por la región. Es la primera tormenta tropical que ha atravesado California desde Nora en 1997, y también es la primera en ingresar a Nevada. Las ciudades de Los Ángeles y San Diego vivieron días récord de lluvia en pleno verano, experimentando 72 mm y 46 mm de precipitación respectivamente.

El Valle de la Muerte, conocido por su aridez, recibió 42 mm de lluvia en un solo día, siendo el segundo día más lluvioso de su historia. Esta marca se encuentra muy cerca del récord anterior de 43 mm de lluvia en agosto de 2022.

Entre tanto se conoció que en Cathedral City, California, los habitantes siguen «atrapadas» en sus casas a la espera de que se despejen las carreteras para poder salir, según informó a CNN Michael Contreras, jefe de bomberos de la ciudad.

Cierres tras el paso de Hillary

Los efectos de la tormenta Hilary también han afectado la rutina diaria de la región. Las escuelas del área de Los Ángeles, San Diego y Pasadena permanecieron cerradas este lunes debido a las condiciones climáticas adversas. El superintendente del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, Alberto Carvalho, anunció el cierre de todas las escuelas debido a la incapacidad de inspeccionar completamente las instalaciones y garantizar la seguridad en las carreteras.

Las autoridades de California están trabajando arduamente para gestionar las consecuencias de la tormenta. En Cathedral City, los equipos de rescate han estado ocupados liberando a las personas atrapadas por escombros. Las inundaciones repentinas, el flujo de lodo y arena han generado situaciones de emergencia en varias áreas.

De momento no se lamentan muertes

A pesar de los desafíos, las autoridades informan que no ha habido víctimas mortales ni heridas graves debido a la tormenta. Se han cancelado las alertas meteorológicas en Los Ángeles, lo que sugiere que la peor parte del impacto ya ha pasado. A medida que la región se recupera de los efectos de la tormenta, la comunidad se esfuerza por volver a la normalidad y superar los desafíos causados por este fenómeno climático.