Si usted reside fuera de Cuba, pero tiene interés en invertir su dinero en la Isla, el primer paso a dar es definir en qué ámbito desea comercializar con Cuba y el segundo paso es pasar a tramitar una Visa A-7 Explorante de negocios y D-7 Comerciante, ambas son emitidas por el Consulado de Cuba en el país del inversor.

Para invertir su dinero en Cuba, usted necesita explorar todas las posibles empresas cubanas que pueden tener interés en desarrollar proyectos de inversión conjunta. Para ello, usted tiene la posibilidad de contactar con el Centro para la Promoción del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera en la Isla; sino puede contactar a la Cámara de Comercio de la República de Cuba; o como tercera opción, usted puede contratar los servicios de una consultoría cubana oficial o contactar a los Ministerios a las que corresponden las respectivas empresas que usted está valorando para su inversión.

Una vez identificada una empresa con la intención de inversión en un proyecto mutuo, debe suscribirse una Carta de Intención de Inversión o Acuerdo Marco.

Luego, deberá comenzar el proceso de negocios, donde se tramita la documentación jurídica y económica que se precisa en estos acuerdos y que resulta indispensable como base legal para todo acuerdo de inversión.

A continuación, se procederá a la presentación de dicha documentación, debidamente legalizada, ante el Ministerio de Inversión Extranjera y Colaboración Económica dela Isla.

El Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros o una comisión oficial que este designe en su defecto se encargará de la aprobación o no de su propuesta de proyecto de inversión.

Finalmente, cuando se apruebe su propuesta, se deberá proceder a la inscripción legal de la Asociación surgida en el Registro de Sociedades de la Cámara de Comercio de la República de Cuba.