Las cortes de Florida atienden a casi medio millón de migrantes. El estado del sureste de Estados Unidos presenta un récord nacional de 3.3 millones de expedientes sin resolver. 

Datos oficiales revelan que al cierre de febrero pasado 494.500 expedientes de inmigrantes estaban sin resolver en las cortes. Esto significa el 14.7% de los 3.363.667 expedientes abiertos en todo el país.

La tendencia en este aspecto es al alza. Las cifras actuales contrastan con los registros de hace apenas nueve meses. Resalta un incremento cercano al millón de casos en todo el país.

Específicamente Florida ha visto cómo su número de expedientes pendientes ha aumentado en más de 120.000 desde julio de 2023. Miami muestra la mayoría de estos atrasos, por lo cual es obvio que el sistema migratorio está saturado.

Baja disponibilidad de jueces

La actual baja disponibilidad de jueces de inmigración, apenas hay 732 en la Florida, pronostica un futuro incierto para miles de familias. El actual ritmo de trabajo y la llegada de más extranjeros a dicho estado hace imposible que los casos se tramiten con la agilidad requerida.

Las personas que deben presentarse ante una corte de inmigración en los Estados Unidos son las siguientes. 

-Personas que no tienen documentos legales de estancia en Estados Unidos y han sido detenidas.

-Individuos a quienes se les ha negado la entrada en un puerto de acceso.

-Inmigrantes que han cometido ciertos delitos o violaciones de su estatus migratorio.

-Personas que buscan asilo, protección bajo la Convención Contra la Tortura, ajuste de estatus o cancelación de la remoción.

No olvides cada paso del proceso. 

Notificación de Comparecencia (NTA): El proceso comienza cuando el individuo recibe una NTA que detalla los motivos por los cuales se debe presentar ante la corte.

Audiencia inicial: El inmigrante comparece ante el juez, quien explica los cargos en su contra y sus derechos legales. 

Audiencias subsiguientes: Pueden incluir presentación de pruebas, testimonios y argumentos legales.

Decisión: Al final del proceso, el juez emite una decisión. Si es desfavorable, el inmigrante puede apelar ante la Junta de Apelaciones de Inmigración.