El Banco Central de Cuba informó en sus redes sociales sobre la emisión de una nueva serie de billetes del peso cubano con año de impresión de 2021. La serie comprende las denominaciones de 200, 500 y 1000 pesos de la moneda nacional.

Según esta información, en los nuevos billetes que se emitirán a partir de este año, la marca de agua (imagen de Celia Sánchez) se sustituirá por la imagen del mártir que se encuentra en el anverso de los mismos, como se detalla a continuación:

En estos casos la nueva denominación de marca de agua, serán en el billete de 200 pesos Frank País, en el de 500 pesos, Ignacio Agramonte y finalmente los de 1000 pesos portarán la marca de agua con la imagen de Julio Antonio Mella.

Recalcaron que los nuevos billetes entrarán en circulación paulatinamente. Las emisiones anteriores de billetes de 200, 500 y 1000 mantienen su curso legal, por lo que circularán conjuntamente.

El Banco Central de la isla también informó esta semana que se habían efectuado cambios en la plataforma EnZona con respecto a la seguridad de las cuentas para mejorar el servicio. Se había incorporado una validación de la cuenta, vía SMS.

Además recordaron que los clientes cubanos ya pueden acudir a las oficinas de Cadecas (las Casas de Cambio en la isla) para realizar extracciones de su tarjeta magnética. Al respecto insisten que como usuarios no deben compartir las últimas operaciones efectuadas en las que se detallan los débitos y extracciones. Tampoco el código de registro para activar y operar sus tarjetas en la plataforma antes mencionada.

“Actualmente el método de activación de las tarjetas está muy vulnerable, con un simple ataque de ingeniería social el estafador puede hacerse de las últimas operaciones, hasta que no mejoren ese aspecto continuaran las estafas, que por cierto no han sido pocas”, refería una usuaria en el Facebook del Banco sobre ese tema.

Otra usuaria reclamaba que si “pudieran ser tan amables de cambiar la manera en que se activan las tarjetas, generando el cobro igual pero pidiendo el pin de la tarjeta que se quiere asociar”. Ella continuaba que “si les cuesta mucho cobren más por asociar cada tarjeta pero quítense ese problema de encima que hay una pila que no lee esto, y son mayores de edad. Los estafadores no creen en lágrimas”.