Antes la escasez de gasolina en la capital cubana, las limitaciones del combustible y las trabas institucionales para los transportistas privados en los servicentros, muchos cubanos se preguntaron si el aumento de los precios del transporte, se vería también en la poca movilidad estatal de La Habana. Así respondieron las autoridades capitalinas ante estas lógicas interrogantes. 

Según la Dirección General de Transporte de La Habana era falso que el pasaje de los ómnibus estatales, con un costo actual de dos pesos cubanos, se aumentaría. Ni los buses rígidos ni los articulados, sufrirán variaciones en su costo. Tampoco la llamada “lanchita de Regla”. 

Añadieron que los Taxis de Cuba, los “Gazelles” mantendrían el mismo costo por el servicio, cinco pesos cubanos por tramos. Los Microbuses de las Cooperativas uno y dos, transportadoras de pasajeros por corredores de la ciudad, igualmente, deberían quedarse en cinco pesos. Así como los taxis habituales, en su regular precio por tarifa, a partir de los kilómetros que recorran desde el origen. 

Con la falta de transportación estatal en la capital, las autoridades de La Habana tomaron la iniciativa, de que en los próximos días, casi 40 buses de trabajadores, se sumen, luego de su horario de traslado de su empresa, a apoyar la transportación de personas en la colapsada capital cubana. 

Se sumarán en un primer lote a las terminales de los municipios donde radican, usando una bandera identificativa por rutas, estas tendrían un precio de cinco pesos cubanos por persona. Dicen que por el momento los buses estatales no “tienen reducción en sus planes de combustibles”. 

Tampoco se ha eliminado, señalan, la obligación de que coches estatales recojan a la población en las paradas de ómnibus para trasladarlos entre los distintos barrios de la capital. 

Los que no tienen tope, son los precios del transporte privado, tanto en La Habana como en el resto del país. Las medidas restrictivas del combustible, siempre afectan el bolsillo del “cubano de a pie”, que tiene pocas opciones en el transporte estatal, como acaban de leer y muchas veces solo les queda la opción del privado. Ante quejas, La Habana ofreció este teléfono: 18 820.