Las autoridades policiales de España detuvieron esta semana a un falso médico cubano que suplantó en una clínica privada de Madrid la identidad de un gastroenterólogo durante nueve meses. El hombre de 43 años también robó las credenciales del facultativo.

Según la prensa española, el cubano ejercía como otra persona en la clínica privada, y en nueve meses facturó más de 1000 citas privadas a casi 800 pacientes. Fue uno de los pacientes quien se percató de que esa persona no era quien decía ser y avisó a la víctima del fraude, el doctor original.

Además de la detención del falso médico cubano, la policía de Madrid, España, también investiga a quien lo contrató en esa clínica privada, quien debía estar al tanto del fraude.

La investigación, a cargo de la comisaría del distrito Centro de Madrid, inició a principios de abril tras la denuncia del doctor suplantado. El médico legítimo había trabajado en la clínica hasta julio del año pasado, cuando decidió cambiar de lugar de trabajo.

Sin embargo, desde entonces, otro individuo firmaba con su sello, recetaba pruebas y medicamentos a su nombre, y realizaba otras tareas propias de un especialista en aparato digestivo.

Capturan a falso médico cubano en España 

Según la víctima suplantada, un paciente antiguo de la clínica de Madrid, fue quien lo alertó de este falso médico cubano que ejercía allí como si fuera él. «Doctor, hay un médico en su antigua consulta que se hace pasar por usted», le dijeron.

Las autoridades verificaron que tanto en la página web del centro médico como en la consulta física figuraban los datos del doctor suplantado. Sin embargo, un individuo distinto atendía a los pacientes. Además, se comprobó que los pacientes salían de la consulta con recetas y pruebas médicas prescritas bajo el número de colegiado del doctor legítimo. Todo un fraude bien pensado.

El cubano fue detenido a finales de abril, aún no se informa si era médico titulado en Cuba o no. Ahora se le acusa de delitos de usurpación de estado civil, falsedad documental e intrusismo profesional, pues no tenía permiso de ejercer en España.

La policía le retiró dos sellos médicos, cuatro recetas y volantes para la realización de pruebas con el nombre del médico suplantado.