La compañía sueca, Jetson Aero, acaba de compartir nuevos detalles sobre su auto volador, en el mercado desde octubre del año pasado. Hasta este momento, los suecos afirman ser los únicos en el mundo que venden vehículos voladores personales.

Este carro especial que semeja un pequeño helicóptero ya ha realizado pruebas de vuelo sobre zonas desérticas y boscosas. Esta vez el auto nombrado Jetson ONE eVTOL realizó pruebas sobre el agua, y sus creadores calificaron la experiencia de increíble.

En un video difundido por la propia empresa, se aprecia la maniobra de despegue con un piloto a bordo, y luego se ve el vuelo sobre el agua de este peculiar vehículo. Según la compañía radicada en Suecia, este coche volador de una sola plaza ofrece facilidad de transporte y comodidad de almacenamiento con sólo 40 kg de peso, sin contar a la persona dentro.

La compañía sueca Jetson AB surgió en 2017. Sus dueños, Peter Ternström y Tomasz Patan, se propusieron hacer posible que todos los conductores de autos pudieran ser también pilotos. Desde entonces Jetson ha continuado desarrollando su modelo de coche aéreo.

En la página web de la empresa se afirma: “Nuestro objetivo es hacer que los cielos estén disponibles para todos con nuestro vehículo aéreo eléctrico personal seguro”. Para ello sus ingenieros se han enfocado en la tecnología eVTOL, que traducido al español significa “despegue y aterrizaje vertical eléctrico”.

Alta demanda de este vehículo aéreo

El Jetson ONE fue oficialmente en octubre pasado. Este año producirán solo 12 autos, y antes de estar listos ya fueron vendidos. Según el plan de la compañía, en 2023 se fabricarían 242 unidades, que igualmente ya se vendieron.

La demanda de este tipo de autos es tal, que la compañía sueca Jetson Aero recibió más de 3000 pedidos, y no están en condiciones de dar respuesta a todos.

En precio actual del carro volador es de $92 000.00 dólares. Para reservar su compra es preciso hacer un depósito previo de $22 000.00 dólares. De cualquier modo, su costo no parece ser obstáculo para que algunos se empeñen en conquistar el cielo desde el garaje de sus casas.