Así lo asegura el director de la única empresa que fabrica baterías para equipos automotores en Cuba, hoy con “sequía” de producciones por falta de materias primas.

Aunque importan alrededor del 65 % de los componentes para la fabricación de sus baterías, directivos de la Empresa de Acumuladores XX Aniversario del Triunfo de la Revolución ubicada en Granma, ven posible “incursionar en el ensamblaje de otros modelos de baterías como las que emplean las motorinas eléctricas”. 

Reconocen que su “demanda en el país tiene cifras nada despreciables”, según reporte de Granma.

Reynier Estrada Olivera, al frente de la fábrica de Manzanillo, explica al diario que “las baterías que usan las motorinas cuentan con una tecnología distinta a la que está instalada en la fábrica”. 

Sin embargo, asegura que “no es una utopía poder ensamblarlas en Cuba”. 

Señala que “cuentan con el local dentro de la fábrica y el recurso humano capacitado”, no obstante, no se ha puesto en marcha aún “una asociación con capital foráneo que proporcione los componentes necesarios para poder realizar aquí el ensamblaje”.

Sus proyecciones distan mucho de la realidad de la única industria cubana que fabrica baterías para equipos automotores. 

“Hace una década demostró sus potencialidades al colocar en el mercado del sector empresarial 160 100 baterías, más de la mitad de las 300 000 que demanda Cuba al año”, reseña el texto. 

Pero, sus números recientes arrojan poco más de 33 200 unidades, lo que constituye “su producción histórica más baja”. Apenas 6 000 baterías se entregarán mensualmente en lo que resta de 2022. 

Para el directivo, el principal causante de esta situación es “la paralización de la industria durante varios meses, debido a la falta, entre otros recursos, de su materia prima principal: el plomo importado”.

El director de la fábrica de componentes destacó además la importancia de buscar alternativas que generen ingresos a sus obreros. 

“Tenemos obreros con un enorme sentido de pertenencia, pero también necesitan sentirse estimulados económicamente”, agregó. 

De momento, comunican, se encuentran “negociando con una firma extranjera la entrada al país de baterías en skd, las cuales nosotros ensamblaríamos y les pondríamos carga, a fin de situarlas en el mercado nacional”. 

Aunque han incorporado “surtidos pequeños de baterías para autos ligeros y la reparación de otras unidades, estas variantes no solucionan la situación financiera de la entidad”, aclaran. 

La compra y venta de baterías para motorinas en Cuba es usual dentro de los grupos de Facebook. 

A finales de 2021, en una publicación de un usuario una batería de litio se comercializaba por el precio de 850 dólares americanos.