Varios turistas canadienses que han enfermado en la isla, en medio de la creciente ola de contagios en el mundo y por supuesto en Cuba, mandaron a través de reportes de prensa, una advertencia para que se evitaran el estrés y los problemas que un problema así trae consigo. Debido a ello, Air Canada, por ejemplo, anunció que reduciría los vuelos a destinos de sol desde el 24 de enero hasta el 30 de abril “a la luz del contexto pandémico actual”. 

Según la prensa canadiense, numerosos turistas canadienses actualmente repensarían su viaje a la isla, debido a positivos en sus pruebas, lo que hace de sus vacaciones un dolor de cabeza. Por ejemplo, una residente de Toronto de 28 años y su novio habían reservado unas vacaciones con todo incluido en un resort en Holguín. Su fecha de salida fue el 10 de diciembre, menos de una semana antes de que el gobierno canadiense instituyera una advertencia contra los viajes no esenciales al extranjero. 

“Si pudiera regresar y darme una idea de lo que estaba haciendo, habría cancelado el 100 por ciento. No valía la pena el estrés”, dijo la joven al diario Global News en una entrevista. Ella, como muchos otros canadienses que han volado a destinos caribeños durante la ola actual, dio positivo en el extranjero y lo pagó financiera y emocionalmente. 

Durante el tiempo del aislamiento en un “hotel de cuarentena”, que era decididamente menos lujoso que el resort donde habían pasado la mayor parte de la semana, la canadiense dice el agua potable era limitada, no había agua caliente en la pila y la comida era prácticamente “incomible”. 

OTRAS VICISITUDES DE TURISTAS CANADIENSES EN CUBA

Cuando salió del autoaislamiento lo hizo con un gasto extra de 588 dólares por su alojamiento en cuarentena, servicios médicos y una segunda prueba de PCR, que resultó negativa. El viaje se reservó a través de la aerolínea Sunwing, que según la clienta les ha estado dando “vueltas” y no está claro si su seguro de viaje, comprado a un proveedor canadiense, cubrirá estos costos adicionales.

Algo similar sucedió también en Holguín con un grupo de turistas canadienses de hasta 15 amigos cercanos, que fueron a la isla a despedir a la madre de uno de ellos. Los foros de discusión de viajes y los grupos de Facebook revelan un aumento reciente en la cantidad de personas que relatan problemas, dolores de cabeza y costos económicos similares como resultado de una prueba positiva en el extranjero.

Dicen desde Canadá, el principal emisor de turistas a Cuba, que varias aerolíneas han anunciado recientemente planes para cortar algunos de sus vuelos programados en medio del aumento de casos, lo que complica aún más los planes de viaje de los canadienses.