Una potente tormenta invernal se avecina sobre Estados Unidos, pronosticándose condiciones meteorológicas extremadamente adversas que abarcan desde fuertes nevadas hasta amenazas de tornados y graves inundaciones. El fenómeno afectará a millones de personas. Los detalles a continuación.

Este fenómeno climático, que se desplaza rápidamente desde el suroeste hasta el noreste del país, está dejando a su paso un rastro de nieve y fenómenos meteorológicos inusuales.

La primera gran tormenta invernal de la temporada ha dejado más de 30 cm de nieve en el noreste, además de lluvia, hielo e incluso el primer tornado del año a lo largo de su trayectoria desde la costa del Golfo de México hasta Maine.

Aunque esta tormenta está en gran parte disipándose, la atención se centra en la siguiente, que se espera que se fortalezca rápidamente, convirtiéndose en una tormenta de enero excepcionalmente potente.

Más de 10 millones de personas están bajo alerta meteorológica invernal desde California hasta Illinois, con millones más enfrentándose a las amenazas de la tormenta en su parte cálida.

A pesar de su desplazamiento rápido, estimado en más de 2.800 kilómetros en 72 horas, se anticipan notables acumulaciones de nieve en más de media docena de estados, desde el norte de Nuevo México hasta la Península Superior de Michigan.

Nevadas en Estados Unidos desde este domingo, lunes y martes

Este domingo, se esperan condiciones de ventisca en el suroeste, centro y sur de las Llanuras, con visibilidad reducida y dificultades en las condiciones de conducción. Los fuertes vientos también generarán sensaciones térmicas por debajo de cero en algunas áreas de las Llanuras.

La tormenta invernal no se limitará a las nevadas y bajas temperaturas, ya que se intensificará al avanzar hacia el noreste, extendiendo su impacto a gran parte de la mitad oriental de Estados Unidos a mediados de semana.

Inundaciones, vientos dañinos y la posibilidad de tornados se suman a las preocupaciones, especialmente a lo largo de la costa del Golfo, donde el aire cálido y húmedo alimenta la amenaza de tormentas severas.

15 millones de personas bajo amenaza severa

Más de 15 millones de personas están bajo amenaza de tormenta fuerte desde Texas hasta Florida este lunes, y más de 35 millones enfrentan el mismo riesgo el martes desde el Panhandle de Florida hasta los Outer Banks de Carolina del Norte.

La posibilidad de inundaciones significativas también está presente, con fuertes vientos arrastrando agua hacia la costa y provocando tormentas pluviales.

Se pronostican precipitaciones totales de 2,5 a 7,6 centímetros desde la costa del Golfo hasta Nueva Inglaterra, con lugares aislados que podrían superar los 10 centímetros.

La preocupación por las inundaciones en el noreste se intensifica, ya que las fuertes lluvias acelerarán el deshielo y aumentarán el riesgo de inundaciones fluviales y repentinas.

Además, más de 252.000 clientes se encuentran sin electricidad en Estados Unidos debido a la tormenta, y se espera que los fuertes vientos causen daños significativos, superando los 80 km/h en algunas áreas, según el Centro de Predicción Meteorológica.

Las autoridades advierten sobre la posibilidad de cortes de electricidad y emiten alertas de vientos fuertes, e incluso alertas de vientos huracanados para las zonas costeras.

Aunque se espera que el sistema de tormentas se disipe hacia el final de la semana, existe la posibilidad de que otra tormenta siga un camino similar, impactando nuevamente algunas áreas afectadas a finales de semana y el fin de semana.

La población se mantiene en alerta ante los diversos riesgos climáticos que presenta esta tormenta invernal excepcionalmente potente.