En esta ocasión prepararemos esta crema con remolacha. El resultado es contundente. Un plato bien energizante y nutritivo. Y, además, brinda un toque súper colorido a nuestra mesa y a nuestro menú. Directorio Cubano siempre presto a jugar con las recetas tradicionales.

La remolacha clasifica en el reino de las hortalizas. Entre sus múltiples beneficios, podemos destacar sus propiedades desintoxicantes. Contribuye a depurar el organismo, y a combatir la inflamación.

No hay que decir más para entender lo tremendamente útil de integrar la remolacha a nuestro menú habitual. Y esta receta ayuda a hacerlo de una manera sencilla y divertida.

El salmorejo de remolacha caerá bien a todo el mundo. Pero podemos asegurar que, en especial, agradará a los niños y los ancianos de casa.

Ingredientes:

• 2 remolachas pequeñas
• 2 huevos
• 6 tomates
• 100 g de pan duro
• 2 dientes de ajo
• 100 mL de aceite de oliva (de girasol, u otro aceite para cocinar)
• 3 cucharadas soperas de vinagre (de preferencia, de piña o manzana, pero podemos usar cualquiera)
• 100 g de queso fresco
• sal (al gusto)

Preparación:

1. Cocemos las remolachas en agua con una pizca de sal. Puede demorar hasta una hora. Cuando estén frescas las pelamos y cortamos en cubos. Reservamos.
2. Cocemos también los huevos. En unos 15 minutos deben estar listos. Cuando están, los refrescamos y pelamos.
3. En tanto, en el vaso de la licuadora, colocamos el pan desmenuzado, junto con el aceite y el vinagre. Dejamos reposar, para que el líquido ablande el pan.
4. Pelamos los tomates y los cortamos en pedacitos. También los metemos en la licuadora. Batimos para mezclar los primeros ingredientes.
5. Pelamos los dientes de ajo y los troceamos bien pequeñitos. Luego los añadimos a la mezcla en la licuadora, junto con los pedazos de remolacha. Punteamos con sal, y batimos todo.
6. Por último, picamos los huevos en cuadritos, también el queso.
7. Vertemos el contenido en un recipiente hondo, y lo guardamos en el frío, como mínimo por una hora.

Para emplatar usamos un plato hondo, o un cuenco. Una vez servido, le rociamos encima ralladura de queso fresco. En el centro colocamos los cuadritos de huevo.

Otra opción es rallar los huevos, en vez de trocearlos. Luego esparcimos la ralladura en los bordes del plato.

Además, podemos acompañar nuestro salmorejo de remolacha con trocitos de carne. El lomo ahumado le pega muy bien. O, si lo deseamos, con queso crema (o requesón), y crutones caseros.

¿Ya lo habían probado? ¿Lo conocen con otro nombre? ¿Usualmente lo preparan de otra manera? Directorio Cubano quiere saber. Sus comentarios y recetas culinarias siempre son bienvenidos.