En medio de la crisis económica y social actual, tal parece que se avecinan más medidas urgentes o al menos eso parece tras el llamado del Partido Comunista cubano que convoca a su X Pleno para debatir «temas cruciales de la economía y sociedad». En un contexto nacional marcado por «desafíos económicos y sociales», el Comité Central del Partido Comunista de Cuba convocó este lunes a su X Pleno, que se celebrará los próximos días 4 y 5 de julio.

Durante esta sesión, se analizarán asuntos esenciales que inciden directamente en la vida del pueblo cubano, aseguraron en medios del oficialismo.

Entre los temas principales se encuentra el cumplimiento del Programa de Gobierno para corregir distorsiones económicas y reimpulsar la economía nacional, una prioridad en la actual etapa.

Asimismo, se discutirá el plan de estabilización del sistema electroenergético nacional, un elemento clave para garantizar servicios básicos y estabilidad en el país, ante la crisis de apagones de más de 10 horas en la mayoría del país.

Otro punto relevante de la agenda será la evaluación de la política de cuadros, en seguimiento a lo aprobado en el 8vo. Congreso del Partido. Además el Buró Político rendirá cuenta sobre su gestión y decisiones adoptadas en los últimos meses. Como colofón, se espera la aprobación de la convocatoria al 9no. Congreso del Partido Comunista de Cuba.

¿Más medidas en el próximo pleno del partido cubano?

A lo largo de su historia, los Plenos del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) han sido escenarios clave para definir líneas económicas y sociales del país. Aunque sus contenidos no siempre se difunden con detalle, en diversos plenos se han tomado decisiones y evaluaciones estratégicas. De allí que muchos vean el inicio de julio, como propicio para el anuncio de más medidas económicas y sociales.

Por ejemplo, la reforma monetaria y unificación del peso cubano se aprobaron durante plenos de 2013–2018. El análisis y preparación de la Tarea Ordenamiento, que luego se implementó en 2021, la decisión de avanzar hacia una moneda única (CUP), eliminando el CUC y la discusión sobre los efectos salariales y precios derivados del proceso.